Por esta causa los judíos perseguían a Jesús, porque hacía estas cosas en sábado. Pero Jesús les respondió: Mi Padre hasta ahora trabaja; también yo trabajo.
Juan 5:16-17
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Mi trabajo es mi llamado
¿Cuál fue tu primer trabajo, cómo lo conseguiste y qué impacto tuvo en ti? ¿Cuál es el trabajo más difícil que has hecho y cómo ese trabajo fuerte cambió en quién te has convertido de alguna manera? ¿Qué tiene de difícil el trabajo al que se enfrenta esta semana? ¿Has recordado u olvidado entregar de manera simple y silenciosa cada uno de estos desafíos a Jesús?
Gran parte de nuestra vida es “vida laboral”, sin embargo, tenemos una tendencia a dividirnos como personas. Pero ¿Y si el trabajo es, profundamente, nuestro “acto espiritual de adoración”? ¿Qué significa adorar a Dios en nuestro trabajo? ¿De qué manera ves tu trabajo como una expresión de su vida de corazón / alma / mente / fuerza con Jesús?
Jesús sana a un cojo junto al estanque de Betesda en sábado, y los líderes judíos se enfurecen: “Entonces los líderes judíos comenzaron a acosar a Jesús por violar las reglas del sábado. Pero Jesús respondió: ‘Mi Padre siempre está trabajando, y yo también'”.
En el video, Keisha llega a entender su trabajo como un llamado. Como una forma de cuidar a los demás. Como su “acto espiritual de adoración”. El trabajo, para todos nosotros, nos ofrece la oportunidad de entregar a Jesús todo nuestro ser: nuestro corazón / alma / mente / fuerza.
- ¿Es todo trabajo “santo”, por qué o por qué no? ¿Qué importancia tiene el que nuestro trabajo esté directamente vinculado con nuestro llamado y por qué?
- Jesús “trabajó” el sábado: ¿cómo has navegado en tu vida la relación entre el trabajo y descanso?